Una operación tan sencilla como levantamos por la mañana, como apagar la alarma, encender la luz, bañarnos, preparar los alimentos, implican el uso de la energía en sus diferentes formas, a pequeña escala en una casa, a media escala en una comunidad, a gran escala en una ciudad, una industria, factores como el crecimiento de la población han llevado a que cada vez seamos mas personas las que utilizamos estos recursos limitados, debido al crecimiento de la población en el mundo, el avance en la industria y medios de producción, la liberación de gases contaminantes ha causado un deterioro ambiental irreversible, en nuestro país son millones de dólares los que se destinan a congresos, reuniones, estudios, para evitar lo inevitable, para revertir lo irreversible, ya que se necesitarían grandes cantidades de energía para regresar a las condiciones anteriores, del cual un pequeñísimo porcentaje correspondería a El Salvador.
Poco es lo que podemos hacer para minimizar el impacto a nivel regional, ya que 21,041 km cuadrados, pueden hacer poco frente al resto de América, sin embargo, hay que aprovechar la ayuda internacional que puede ayudarnos a cuidar los pocos recursos con que contamos en estos momentos, 6,251,495 salvadoreños pueden aportar mucho a cuidar los pocos recursos que tenemos. No es ninguna gracia ser el segundo país con mayor deforestación en América Latina después de Haití, cuando a nivel centroamericano somos uno de los países con mayor radiación solar, arriba de los 4 kwh/(m cuadrado_día), de los cuales no utilizamos ni el 1%, sería bueno que por pura voluntad, cada uno de nosotros hiciera lo que le corresponde en materia de cuidar el medio ambiente, El Salvador tiene oportunidad de generar energía limpia y recursos energéticos a partir de fuentes renovables, Energía Geotérmica, Solar, Hídrica, a pequeña escala, Energía Eólica, generación de Biodiesel, Plantas de Biogas, pero más que eso las instituciones financieras tienen que apoyar este tipo de proyectos, Instituciones de Gobierno, apoyar a pequeños productores. Las Alcaldías deben buscar una mejor manera de disposición y aprovechamiento de residuos sólidos, que le generen valor agregado, y los salvadoreños debemos buscar esas fuentes alternativas de energía para seguir supliendo nuestras necesidades básicas.